Post retirado do Fórum Defesa Brasil, que tem como origem um artigo da "Nueva Mayoria":
Los Franco atiradores de hugo Chavez
El anuncio del Presidente Chávez de que adquiriría 5000 fusiles de francotirador Dragunov a Rusia para armar a las formaciones milicianas ante una eventual invasión de Venezuela por parte de Estados Unidos es una decisión que complementa a los 100.000 fusiles Kalashnikov ya adquiridos anteriormente y a los convenios para fabricar las armas y su munición bajo licencia.
Estas cantidades de armas serían sobradamente suficientes, no solo para la totalidad de las Fuerzas Armadas de Venezuela, que suman 56.000 efectivos, sino también a la Guardia Nacional, que cuenta con 35.000 hombres. Sin embargo la intención parece estar orientada al equipamiento de las milicias territoriales más que a las fuerzas regulares.
En el programa "Alo, Presidente" Chávez expresó respecto a esta compra, "Son fusiles rusos que tienen un alcance que no les voy a decir (?), y además, nosotros estamos inventando algo aquí, que tampoco se los voy a decir, para incrementar su alcance (?). Gringo que se meta por dentro de una quebrada por allá ...¡ Boom ! y vamos a comprar miles de equipos de visión nocturna…" en otro punto brindo indicios sobre sus probables usuarios manifestando "… batallones de selva, de indígenas de montaña(?)…" y "… guerra de guerrilla desde las montañas".
Las experiencias de la guerra de Iraq han sido una oportuna inspiración para el diseño la estrategia defensiva bolivariana basada en la guerra de guerrilla y la movilización de la población para la resistencia total contra las fuerzas de ocupación.
Según las experiencias observadas en los conflictos recientes y en desarrollo, la guerra asimétrica puede ser prolongada indefinidamente y con éxito, por milicias no demasiado adiestradas, pero armadas con productos clásicos de la ingeniería militar rusa, que se caracterizan por la facilidad de operación, rusticidad, bajo costo, sencillo mantenimiento y eficacia letal. Dentro de las armas portátiles se destacan como emblemáticos hace ya varias décadas, el fusil Kalashnicov, el fusil de francotirador Dragunov, la ametralladora PK, el lanzagranadas propulsadas por cohete antitanque RPG 7 y el misil antiaéreo SA 7, además de diversos tipos de minas antitanques y antipersonales.
El fusil Dragunov, Snayperskaya Vintovka Dragunova, o SVD es de calibre 7,62 x 54 mm R, de tiro semiautomático, equipado con aparato de puntería óptico de 4x24 aumentos, tiene un largo de 1,225 m, con 4.31 kg de peso descargado, cuenta con cargador de 10 tiros y funciona por toma de gases en un punto del cañón. Su alcance eficaz es algo más de 800 m aunque la retícula del visor esta graduada hasta los 1300 m.
El viejo cartucho 7,62 x 54 mm R que fue diseñado a fines del siglo XIX para los antiguos fusiles a cerrojo, pero desde hace algunos años existe una versión no exportable denominada 7N14, especialmente diseñado para el SVD, que le otorga superiores prestaciones balísticas para el tiro de precisión a largas distancias.
A pesar de que Rusia se distinguió por sus francotiradores en la Segunda Guerra Mundial, con la Mayor Ludmila Pavlichenko encabezando la lista con 309 muertos, de hecho, la clasificación de fusil para francotirador es cuestionable según las pautas técnicas de occidente, donde se considera al SVD como fusil para tirador especial, selecto o marksman para los norteamericanos, o sea un tirador que puede hacer blanco a por lo menos el doble de la distancia que un tirador promedio, pero que en combate es integrante de la organización de una sección de tiradores de infantería de 30 hombres, a diferencia de las técnicas del francotirador, que combate en forma aislada y encubierta, a veces infiltrado en terreno dominado por el enemigo, formando equipo con otro soldado que actúa como observador y probablemente un tercer integrante quien brinda seguridad inmediata a los otros dos. El francotirador requiere de rasgos particulares como frialdad, paciencia, sigilo, determinación y resistencia aeróbica.
El francotirador y el tirador especial tienen en común que ambos buscan eliminar blancos enemigos importantes como oficiales, observadores adelantados de artillería o servicios de pieza de armas importantes.
El fusil para francotirador en occidente es concebido como un arma a cerrojo, a veces con poderosos calibres de 12,7 mm o incluso en algunos nuevos modelos de hasta 25 mm, con aparatos ópticos de gran cantidad de aumentos, que les brinda precisión y alcance para batir blancos a distancias que exceden los 1000 m de día o de noche. El fusil de carga manual tiene mayor precisión a grandes distancias que uno semiautomático con iguales características técnicas, de calibre, largo del cañón, paso de estrías, etc.
En el viejo Ejercito Rojo, a fines de los 50, surgió como necesidad el SVD, como consecuencia de la adopción del fusil Kalashnikov, ya que si bien éste brindaba a la sección de infantería un formidable volumen de fuego, su alcance eficaz contra blancos puntuales no excedía los 300 m. El SVD fue la primera arma especialmente diseñada para esa finalidad, ya que hasta ese momento en todo el mundo, se usaban fusiles comunes con aparatos ópticos, con mejoras para incrementar la precisión, que disparaban munición especial de competición.
Cada sección de infantería rusa tiene un tirador de SVD en uno de sus tres grupos orgánicos. Esta cantidad de soldados equipados con el SVD, que se proyecta a 3 en la Compañía de150 hombres y 9 en el Batallón de 500 hombres, evidencia que el número de excelentes tiradores, que se pueden mantener suficientemente adiestrados para esta tarea, según los criterios rusos, no son normalmente demasiados.
Considerando la posibilidad de suscripción de Venezuela, ya no solo a la compra de material, sino a criterios de doctrina, organización y equipamiento ruso, podemos comprobar que la totalidad de unidades de las Fuerzas Armadas de Venezuela, de magnitud Batallón y rol táctico terrestre, incluidas las Unidades de Reserva conocidas, las de similar magnitud de la Guardia Nacional y sumando a los institutos de reclutamiento y perfeccionamiento, éstos no requerirían una provisión mayor a unos 1000 fusiles SVD. Queda claro, por lo tanto, que el destino de los restantes 4000 SVD es indudablemente para distribuidos en unidades milicianas.
El mismo Chávez en su reciente revelación respecto a la adquisición de estas armas y a su probable empleo, menciona varios aspectos que son evidentemente un problema a resolver que debe preocuparle a los venezolanos. El alcance del SVD es insuficiente, comparándolo con las armas usadas por los norteamericanos para tareas similares, que incluyen eliminar a los francotiradores enemigos, las que por lo menos, las duplican en alcance. El entrenamiento de un francotirador es posterior a una selección previa muy exigente de excelentes tiradores y demanda constante adiestramiento para mantener esa aptitud, cosa que difícilmente se pueda lograr con un reclutamiento apresurado de campesinos e indígenas, aun cuando combatan en terreno selvático conocido, y por último la superioridad en tecnología de visión nocturna de los posibles invasores constituye una ventaja difícil de superar para cualquier oponente.
Es bastante claro que si Chávez considera seriamente el empleo de esta técnica para la defensa nacional, debiera comenzar inmediatamente un programa de instrucción y adiestramiento muy intensivo para sus formaciones milicianas, cosa que hasta el momento no se ha podido verificar que esté ocurriendo en forma intensa ni organizada, y que exige contar con gran disponibilidad de munición, polígonos de tiro e instructores idóneos, además de largas horas de dedicación personal para los potenciales candidatos a francotirador que debieran contarse inicialmente por miles.
Fuentes:
www.globalsecurity.org consultado 30-08-07
www.world.guns.ru consultado 30-08-07
www.kalashnicov.guns.ru 30-08-07
www.dragunov.net 30-08-07