Los dos próximos aviones
presidenciales “Air Force One”
pueden costar casi como un
portaaviones clase Nimitz
Pocos programas de defensa han recibido tanta atención en los últimos
años como el programa de reemplazo de los aviones presidenciales Air
Force One. Esto se debe principalmente a las persistentes declaraciones del
presidente Trump que pidió alcanzar directamente un acuerdo con Boeing,
que ahorraría enormes sumas de dinero de los contribuyentes. Estas
afirmaciones se han demostrado repetidamente que son huecas y ahora
queda claro que el precio del programa ha subido considerablemente.
Marcus Weisgerber, de Defense One, ha hecho un excelente trabajo para
mantenerse al día del siempre cambiante programa de reemplazo del Air
Force One. En uno de sus artículos más recientes, señala que el coste total
del programa, que incluye proyectos de infraestructura para hangares y una
serie de elementos auxiliares necesarios, se calcula ahora en la friolera de
5.300 millones de dólares. Esto es aproximadamente un tercio más que la
cifra que la Fuerza Aérea ha estado manejando en el pasado para este
programa. Pero lo que es aún más preocupante es que el sólo coste de los
propios aviones y su conversión a VC25B militarizados, ha subido a 4.680
millones de dólares.
Esto es aproximadamente 780 millones más que el coste estimado del
programa inicial de alrededor de 3.900 millones que la Fuerza Aérea había
informado.
En 2018, la Casa Blanca dijo que el supuesto acuerdo de Trump con Boeing
se había recortado en aproximadamente 1.500 millones de dólares del coste
total, más tarde se ha conocido que el acuerdo de Trump no había cambiado
sustancialmente la cantidad que la Fuerza Aérea siempre ha manejado.
Esa cifra de 4.680 millones de dólares es para sólo dos aviones, los cuales
ni siquiera son exactamente nuevos. Han estado parados en el desierto de
Mojave, en California, durante años. Los dos 7478 se construyeron para la
desaparecida aerolínea rusa Transero, que quebró en 2015. Aeroflot compró
la mayoría de sus activos, pero no tuvo ningún interés en los 747
8. Entonces, Boeing voló los aviones al Aeropuerto Logístico del Sur de
California en Victorville, donde han estado almacenados al aire libre desde
entonces.
Después de que Trump asumiera el cargo y convirtiera el programa en uno
de sus proyectos favoritos , se anunció que esos aviones se utilizarían como
aviones de base para los futuros aviones de la Fuerza Aérea y se compraron
a Boeing a un precio increíble que aún no se ha revelado.
Aunque la misión de los Air Force One es sumamente importante, la
adquisición de dos aviones a un precio que se aproxima al coste de
un portaaviones nuclear de la clase Nimitz parece preocupante. Además de
comprar los aviones que no son realmente nuevos, se han reducido las
capacidades críticas para ahorrar dinero, incluyendo la capacidad para
reabastecerse de combustible en vuelo desde los cisternas de la Fuerza
Aérea, una característica que si tienen los actuales VC25A de 30 años de
antigüedad que se van a reemplazar.
Tomando la cifra más baja para el avión, su conversión y entrada en
servicio, estos aviones deberían superar al bombardero furtivo B2A
Spirit como el avión más caro jamás construido. De hecho, según Defence
One, su coste combinado, incluyendo los proyectos de infraestructura y
algunos otros costes adicionales asociados con el programa, excede de lo
que la Marina dice que cuesta un portaaviones de propulsión nuclear de
clase Nimitz que es de alrededor de 4.500 millones de dólares.
Incluso las estimaciones más altas del último portaaviones clase Nimitz que
le dan al barco un precio de 6.200 millones de dólares, ni siquiera mil
millones más que el programa de reemplazo del Air Force One. La cifra más
grande que presenta Defence One, que incluye infraestructura y otros
http://galaxiamilitar.es/los-dos-proximos-aviones-presidenciales-air-force-one-pueden-costar-casi-como-un-portaaviones-clase-nimitz/